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| Aviador Dro en el Simposium Tecno II |
Como veníamos avisando tanto en El Espacio como en Feedback, tras 32 largos años, en los que han cambiado muchas cosas (o no tantas), se ha celebrado la segunda edición del Simposium Tecno.
El primer Simposium Tecno tuvo lugar el 9 de marzo de 1981 y se considera el primer festival de pop electrónico de la historia de nuestro país. Aquella noche, El Aviador Dro y sus Obreros Especializados consiguieron reunir a los mejores grupos tecnopop de la escena madrileña en concierto: Oviforma Sci, El Humano Mecano, Los Iniciados y La Terapia Humana. El Simposium Tecno 2013 vino para reivindicar aquella noche, aquella reunión de pioneros de lo electrónico, de los sintetizadores y del futurismo que cambió el rumbo de la música dance y del pop hasta nuestros tiempos.
El programa de tan especial día se dividía entre unas mesas de debate que ofrecían la oportunidad a los asistentes de rememorar, comentar y charlar con grupos, críticos y artistas protagonistas de ese primer Simposium Tecno y otros pioneros del pop electrónico en nuestro país y una serie de conciertos que dieron continuidad a la célebre velada del 81.
Las mesas de debate, moderadas por el infatigable mutante CTA 102 y protagonizadas por:
1. Mesa Pioneros del Pop Electrónico
Servando Carballar -Biovac N (Aviador Dro)
Lucho Prosper (Bretón Armada, Fangoria, Heroica, Oviformia Sci)
Tomás Fernando Flores, Director de Radio 3 y de Siglo21, (RNE)
Jesús Ordovás, Director de Diario Pop de RNE 3. Periodista, Crítico musical y DJ.
2. Mesa Pop electrónico y tecnología en el Siglo XXI
Luis Delgado, Mecánica Popular, Músico compositor residente del Planetario de Madrid
Nikky Schiller, LOST AND THEN FOUND, Dirty Princess
Digital21 MÚSICO MULTI INSTRUMENTISTA Y VIDEOARTISTA
José Manuel Costa. Director de Retromanía en Radio 3 Extra. Crítico y comisario de artes visuales y sonoras.
El debate giró en torno a los más diversos temas, desde la nostalgia de saber cómo se las arreglaban grupos “que no tocaban en directo” en las fiestas de los recónditos pueblos de la geografía española y lidiaban con el escepticismo, el temor y la ira que generaban sus actuaciones (y lo mucho que disfrutaban ellos con la polémica); de un futuro esquivo de coches voladores que nunca llegó; de la dificultad de radiar bandas emergentes que grababan sus maquetas en cintas de casete no consideradas aptas para su reproducción en la radio nacional; del machismo en el mundo del tecno; de procesos de creación; de música, arte, tecnología y un largo etcétera.
Los interesantes contenidos de las mesas fueron grabados, por lo que esperamos que los mutantes tengan a bien ponerlos a disposición de todos aquellos obreros especializados que no pudieron estar presentes. Las mesas redondas acabaron con el concierto de Radar, que ofrecieron un breve pero intenso repertorio de bases programadas, distorsiones y marcadas melodías.
Una vez finalizada la programación reservada para el salón de actos de Telefónica Flagship Store, la base de operaciones se trasladó a la Sala El Sol, dónde se pondría el broche perfecto al Simposium. Cuando todavía sonaba el "Mezzanine" de Massive Attack de fondo apareció la artista, cantante y activista Nikky Schiller en escena, ataviada de negro y con un velo que se transformaría durante la actuación en todo tipo de sombreros y complementos. Su sonido es una envolvente amalgama de bases entretejidas y sinuosas sobre la que Nikky rapea, susurra y canta.
Tras este inmejorable comienzo llegó el turno de Bretón Armada (Big Toxic fue el encargado, en su mesa, de dar entidad sonora a toda la noche), que hicieron entrar en calor a los asistentes con sus pegadizos temazos electropop. Sonaron con fuerza temas como la inquietante “Imagínate a ti y a mí y una pistola en un hotel” y nos hicieron bailar. Este dúo electrónico se transformó en trío para ofrecernos la primera nota nostálgica de la noche, Oviformia SCI/ Heroica llegaron, tocaron y arrasaron, su setlist fue una reivindicación en toda regla del gran legado que dejaron en la música pop española, con temas como la maravillosa “Hablamos de Nosotros” y las popularizadas por Fangoria “Electricistas” y “Hombres”, que son sólo un ejemplo del gran número de éxitos que firmaron bajo sus dos formaciones.
Para cerrar la noche, como no podía ser de otra manera, los obreros especializados echaron el resto en un concierto plagado de bailes robóticos y proclamas que sonaban a doctrina cantadas a coro por toda la sala. Empezaron fuerte, con la reivindicativa "Arenga de los Sindicatos Futuristas" y el apogeo no decayó ni por un segundo, con un continuo ir y venir de sus componentes que nos volvieron a conquistar con sus infalibles latigazos electro pop: "La chica de Plexiglás", "Nuclear sí, por supuesto" o "Selector de Frecuencias", entre otras, sonaron tan frescas y vigentes como el primer día.
Pues eso, el 2045… en Marte.
Una crónica de Ebepé para El Espacio
